miércoles, 18 de marzo de 2015

Área Única, privatización de la sanidad disfrazada de libre elección

El Gobierno de Aragón avanza sin descanso en la privatización de la sanidad. El pasado lunes, 16 de marzo, publicó en el Boletín Oficial de Aragón el decreto por el que se implantará en la comunidad el área única sanitaria.
Las bonitas palabras con las que nos tratan de argumentar este mecanismo de privatización, “mejora de la coordinación”, “descenso de burocratización”, ocultan una voluntad de deterioro de los centros públicos y la transformación del Sistema Público de Salud en un mercado sanitario en el que competirán centros públicos y privados, abriendo así la posibilidad de beneficio empresarial a costa de nuestra salud. Como ha ocurrido en la Comunidad de Madrid que desde su aplicación, han florecido los centros privados a costa de la sanidad pública.


El proyecto de Área Única y Libre Elección en Aragón, ha sido impulsado por Ángel Sanz, que cuenta con un amplio curriculum privatizador en Navarra privatizo las cocinas, laboratorios e implantó el área única en el Osasunbidea

Este proyecto reducirá las actuales ocho Áreas Sanitarias del territorio a tres (Zaragoza, Huesca y Teruel). Al convertir a toda la provincia en una única área nos presentan como una ventaja la posibilidad de elegir médica en cualquier punto de la provincia.Teniendo en cuenta que hace muchos años que tenemos la posibilidad de, cambiar de médico dentro de nuestra zona ¿por qué ahora esta medida? ¿Qué sentido tiene que los vecinos de la Jota elijan su médico en Valdespartera?



La asignación de recursos no se realizará en función de las características y necesidades de la población de la zona, sino que cuantas más personas elijan un determinado centro, más presupuesto tendrá.
Pero si todo el mundo piensa que un determinado centro es el mejor, supuestamente todo el mundo elegirá ese centro ¿o no? ¿acaso ese centro “excelente” podrá atender a toda la población que antes atendía toda la red de centros? La respuesta, obviamente, es no.
Todo centro tiene una capacidad determinada y si la demanda supera dicha capacidad es el centro el que elegirá a los pacientes-clientes y no al revés.
Si los centros obtienen incentivos económicos por objetivos como “pacientes con menos días de ingreso hospitalario”, o “menor número de derivaciones a especialidades”, cuando tengan que elegir entre la solicitud de un paciente de clase media-alta de 20 años y un paciente de clase trabajadora de 75 años ¿a quién elegirán?.  Además, los centros sanitarios situados en barrios periféricos, barrios rurales o zonas de menor poder adquisitivo serán elegidos por menos pacientes, por lo que obtendrán menos recursos, lo cual, a su vez, hará que sean menos atractivos para otros pacientes-clientes potenciales.

El objetivo del Área Única y la Libre Elección es crear  un sistema sanitario de primera y otro de segunda categoría, transfiriendo enormes cantidades de nuestro dinero a manos de empresas privadas.
Si permitimos que la atención sanitaria y nuestros derechos se conviertan en una mercancía capaz de generar beneficios para las empresas privadas, sólo aquellas personas con alto poder adquisitivo podrán acceder a la atención y a los tratamientos médicos que precisen. Las personas más vulnerables económicamente, nos convertiremos en carnaza de beneficencia, sin acceso a tratamientos costosos, ni a pruebas que permitan diagnosticar a tiempo enfermedades que podrían haberse curado. Ningún pobre, como nosotros, volverá a morir de muerte natural.

Desde la Plataforma contra la privatización de la Sanidad queremos manifestar nuestra oposición y rechazo  a la implantación del Área Única en Aragón, consideramos que esta medida alterará de forma radical los principios de igualdad de trato y referencia geográfica de proximidad en los que debe basarse la atención sanitaria.