Aragón es la segunda comunidad que más recortará porcentualmente en sanidad y la tercera en educación en los presupuestos presentados por su Ejecutivo para el próximo año. El proyecto de ley registrado por la DGA dedica a gasto social el 65%, hasta 5 puntos menos que la media de las autonomías, aunque sigue suponiendo más de las dos terceras partes del presupuesto. Solo la Región de Murcia -una comunidad en una situación financiera mucho más delicada que la aragonesa- le supera en el ajuste.
En concreto, en Sanidad, Aragón (con un 12,9% de recorte) solo es superada por Murcia (-14%). En cuanto a Educación, el recorte de Aragón es del 10,2%, solo superado por Madrid (-17%) y Murcia (-11,9%). Pero el recorte también afecta a otras áreas sociales, como la dependencia. Sin embargo, en esa competencia sigue la estela del resto de autonomías, la mayoría con un recorte que alcanza el 15% (Aragón se queda en el 14,9% de ajuste).
El Gobierno de Aragón insiste en que los recortes son mínimos y en ningún caso restan calidad a los servicios públicos. Se trata, aseguran, de mejorar la eficiencia en el gasto público y garantizan el buen funcionamiento de los pilares básicos del estado de bienestar y que en ningún caso se puede hablar -como se está haciendo en la Comunidad de Madrid, por ejemplo- de un deterioro de los servicios públicos.
PROBLEMAS / Sin embargo, en el último año ha habido indicios de que los recortes generan problemas. Al menos si sirve como indicador el termómetro de las protestas en la calle. Las listas de espera en los hospitales públicos aragoneses se han triplicado (aunque en el último trimestre ha habido una ligera mejoría) y se han prescindido de 1.000 profesores en los colegios de Aragón. Además, 30.000 familias se han quedado sin becas de comedor o de libros este año 2012.
La educación, la sanidad, las políticas de vivienda y las políticas sociales, se recortan entre un 10-20% sobre cifras ya por sí muy reducidas por los presupuestos de 2012. Este recorte se traduce en un 12,9 % en Sanidad (238,6 millones de euros), un 10,2% en Educación (101,2 millones de euros). Bien es cierto que se ha presupuestado incluso medio millón de euros más para las becas de comedor (4 millones), que la oposición considera insuficiente para atender a las más de 30.000 familias pendientes este año. El gasto en servicios sociales se reduce un 15 % (54,5 millones de euros). Las entidades sociales sufren un recorte del 4,98%.
Asimismo, las ayudas a la dependencia se han recortado un 43% y un 75% en escuelas infantiles (los convenios del Gobierno con los ayuntamientos para educación infantil ya han sufrido un ajuste del 35% este año). También ha habido recortes en Economía y Empleo, en una comunidad que ha incrementado su paro en 20.000 personas en año y medio, aunque se destinan 500 millones para fomentar la creación de trabajo.